Factores de Competitividad y Análisis Financiero en la Empresa Familiar
Uno de los objetivos para el que nació el Instituto de la Empresa Familiar hace ya 25 años fue dar a conocer la importancia de las empresas familiares para la sociedad. De hecho, puede decirse que, al representar el 90% de las empresas, constituyen la columna vertebral de la economía real. Por ello, por su relevancia cuantitativa, pero también cualitativa, conviene analizar su comportamiento económico-financiero, para entender, por ejemplo, aspectos como su mayor compromiso con el empleo.
Estudios como éste, Factores de competitividad y análisis financiero en la empresa familiar, resultan cruciales en un entorno cada vez más cambiante, y en el que términos como globalización, digitalización, industria 4.0, o robotización son ya habituales en los servicios de estudio, en los debates económicos y en las propias empresas. Analizar la evolución de nuestras empresas familiares nos permite explicar si se están entendiendo bien las tendencias internacionales y su adaptación a estos cambios.
La convivencia de empresa y familia determina en gran medida las decisiones de expansión, internacionalización, formación, inversión o innovación. Estos son, como se analiza a continuación, algunos de los factores más relevantes para definir la competitividad de las empresas familiares en este nuevo entorno, a la vez que contribuyen a explicar su comportamiento económico-financiero durante y tras la salida de la crisis.
Como todas las empresas, la rentabilidad es uno de los principales objetivos de las empresas familiares, sin embargo, también se caracterizan por compartir unos valores, unos principios y una cultura en donde la prudencia, la austeridad, la visión de largo plazo, o el compromiso con el entorno constituyen parte de su ADN. En un mundo cada vez más concienciado, más comprometido, donde la sostenibilidad adquiere una importancia creciente, estos valores se convierten en una parte intangible de sus activos y pueden tener su retorno a largo plazo, algo que ya se observa en las empresas familiares de mayor dimensión.
Este informe constituye un ejemplo claro de análisis y reflexión para entender un poco mejor la naturaleza de estas empresas, su compromiso con el buen gobierno corporativo y cómo ello puede repercutir en la evolución de las principales variables económicas y financieras. Y al mismo tiempo, permite entender mejor la importancia de la dimensión como factor de competitividad, algo en lo que el Instituto lleva trabajando ya bastante tiempo.