Formación de calidad para un empleo de calidad

Este documento recoge la transcripción de la Jornada de debate “Formación de Calidad para un Empleo de Calidad”, organizada por el IEF el 20 de junio de 2019 y que reunió en Madrid a un nutrido grupo de empresarios, expertos en formación y representantes de los agentes sociales.

El presidente del IEF, Francisco J. Riberas, propuso en esta jornada a Gobierno, empresarios, agentes sociales, comunidad académica y partidos políticos la elaboración de un plan estratégico de la educación, que permita adaptar la formación que reciben nuestros jóvenes a la nueva economía digital, incorpore materias y habilidades que en estos momentos resultan imprescindibles pero que no figuran en los planes de estudios y facilite la incorporación al mercado laboral con garantías de acceder a empleos de calidad. Éste fué el eje principal de esta jornada de debate.

El desfase entre el sistema de formación y el mercado de trabajo

La tasa de paro española es del 14,7%, indicador que en el caso de los jóvenes entre 16 y 24 años se dispara hasta el 34,97%, habiendo llegado incluso a superar el 55% en los momentos álgidos de la crisis. En un país con uno de los niveles de desempleo más altos de Europa, se da, sin embargo, la paradoja de que las empresas tienen a menudo serias dificultades para encontrar personal cualificado que se adapte a los requerimientos de los nuevos empleos. Cada vez hay menos jóvenes en el mercado laboral y los que están dispuestos a trabajar, en muchos casos tienen una preparación que no se corresponde con las necesidades de las compañías.

Existe un evidente desfase entre nuestro sistema de formación y el mercado de trabajo. Y esta realidad se ha convertido en uno de los principales obstáculos para el crecimiento empresarial.

La visión a largo plazo de la empresa familiar

Riberas recordó que la principal característica de la empresa familiar es la visión a largo plazo, y en ese horizonte de futuro la educación y el aprendizaje de los más jóvenes, de las nuevas generaciones, resultan fundamentales.

El debate, en su opinión, hay que centrarlo en lo que el mercado dice en estos momentos que no se está enseñando a nuestros jóvenes. Los planes de estudios han de ser flexibles y orientados a las nuevas tecnologías, con un peso creciente de la Formación Profesional Dual, que en ningún caso ha de ser considerada una opción secundaria.

Además, el presidente del IEF recalcó que esta es una tarea urgente, que no se puede perder más tiempo y avanzó la disposición de las empresas familiares para ser parte activa de este proyecto, dada la importancia que para este tipo de compañías tiene la formación de las nuevas generaciones, que se han de ir incorporando paulatinamente a su gestión.

Riberas insistió en la necesidad de que en este periodo político nuevo que se abría tras las últimas elecciones se alcancen acuerdos amplios en los asuntos que afectan de manera especial al futuro del país, tal y como se hizo hace 40 años, durante la transición, con el consenso logrado entre todos los partidos.

La jornada contó asimismo con diversas mesas de debate. La primera de ellas ha estado integrada por Martin Führer, responsable de FP de la Cámara de Baviera, y Juan Corona director general del Instituto de la Empresa Familiar, que disertaron sobre las mejores prácticas de los diferentes modelos educativos.

Para Juan Corona el modelo universitario español apenas ha evolucionado en los últimos 50 años. Además, en su opinión es una anomalía que la empresa familiar, que es el primer generador de empleo de este país, no se explique en la mayor parte de las Universidades del país.

La FP Dual en Alemania

Por su parte, Martin Führer desveló que en Alemania uno de cada tres jóvenes quiere ser mecánico de coches. «El problema de la Formación Profesional Dual en España es de motivación. Hay que motivar a los jóvenes desde la familia. En Alemania está muy bien visto en el entorno familiar que los jóvenes estudien Formación Profesional”. Führer explicó algunas de las particularidades del sistema en su país, como es el hecho de que el aprendiz ha de solicitar a la empresa un puesto de formación, como si de un empleo se tratase. El curso dura tres años y ya desde el primer momento se cobra un sueldo que oscilará entre los 800 y los 1.200 euros.

La opinión de los agentes sociales 

También los agentes sociales estuvieron presentes en el debate, con una interesantísima mesa redonda en la que participaron el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales, Antonio Garamendi, la secretaria Confederal de UGT, Adela Carrió, y la secretaria de Política Social y Movimientos Sociales de CCOO, Paula Guisande. Los tres coincidieron en destacar la desconexión total que existe en este momento entre el sistema educativo y el mercado  laboral.

«Ni en el empleo ni en la formación valen los modelos que teníamos hasta ahora, porque el mundo ha cambiado mucho: globalización, digitalización, disrupción tecnológica, inteligencia artificial… son factores nuevos que lo alteran todo», según Antonio Garamendi, Presidente de la CEOE.

Adela Carrió, por su parte, aseguró que el mercado laboral no le dice al mundo educativo lo que necesita y éste, por tanto, ofrece la formación profesional que tiene en su catálogo, y no la que en realidad necesitan los jóvenes para acceder a las vacantes que existen en las empresas.

Para Paula Guisande, el problema del paro juvenil depende de numerosos factores, no solo de la educación. Es también una cuestión cultural y, en gran medida, responsabilidad de las empresas.

La experiencia de las empresas familiares con la FP Dual

La experiencia de las empresas familiares españolas con la FP Dual centraba la última de las mesas de debate de la jornada, con la presencia de Maria Helena Antolín, vicepresidenta del Grupo Antolin, y Nicolás de Trinchería, consejero delegado de Simón Holding.

En opinión de Maria Helena Antolin, la Administración debe trabajar en una mayor adaptación de los programas formativos de las universidades y centros de Formación Profesional a las necesidades de las empresas. «Los itinerarios formativos deben incluir más competencias en idiomas y tienen que preparar a los estudiantes para trabajar en equipos multidisciplinares, gestionar proyectos y tener una visión más internacional del negocio”, señaló la vicepresidenta de Grupo Antolin.

Para Nicolás de Trinchería, hay una demanda no satisfecha de personal de FP para la industria que incluso está generando en estos momentos inflación de salarios. «Sería muy bueno para todos, empresas y trabajadores, que el sistema apostase ya de una forma decidida por la FP Dual», aseguró.